José María Fonseca, presidente de Terras Gauda

• La Estación Marítima de Vigo acoge hasta el próximo 22 de Noviembre un genuino maridaje de arte y vino, exponiendo las 1.568 imágenes presentadas a la 13ª Bienal Internacional de Cartelismo Terras Gauda – Concurso Francisco Mantecón
  

• Hablamos con Jose María Fonseca, presidente del Grupo Terras Gauda, promotor de uno de los mayores certámenes de cartelismo a nivel mundial. 

  
  

Cerca de 1.600 carteles procedentes de 62 países, parecen cifras para estar orgullosos.

La verdad es que sí. Cuando empezamos con el concurso de diseño Francisco Mantecón la verdad es que no imaginábamos esto. Bueno, pasó también cuando empezamos con el vino, pero al final las cosas te pones a trabajar en ellas, se van superando… Hemos tenido la suerte enorme de tener a una comisaria como María José Sánchez que trabajó desde el minuto uno, desde que fundamos el concurso, fue creciendo y hoy estamos… debo decirlo sin modestia porque es la verdad, ante uno de los tres grandes concursos de cartelismo del mundo. El único que expone las 1.600 obras de la forma que lo hacemos nosotros. Es para estar muy, muy satisfecho.

Impresiona la repercusión internacional que ha alcanzado el concurso, están llegando propuestas de todos los rincones del globlo.

Están llegando cosas de los cinco continentes, pero es que además el nivel medio de los carteles ha ido superándose día a día. Universidades de todo el mundo, escuelas de diseño, tenemos el respaldo de las grandes asociaciones de diseñadores, los concursantes que han ganado… Tenemos que recordar que han ganado diseñadores de primer nivel mundial, entre ellos el catedrático de diseño de la Universidad de Osaka, ni más ni menos. Todo esto ha ido haciendo del concurso un referente internacional y con muchísimo prestigio dentro del mundo del diseño

Vale la pena acercarse hasta la Estación Marítima de Vigo entonces...

La verdad es que está yendo mucha gente a visitar la exposición, fruto del acuerdo que firmamos ya hace años cuando era presidenta del puerto Corina Porro y desde entonces hemos mantenido con los sucesivos presidentes.

Ver todas las obras expuestas y hacer la entrega de premios arropados por los 1.600 carteles y por el presidente de la Xunta que cada dos años cumple su palabra de estar con nosotros entre otras muchas autoridades es algo que nos llena de orgullo y satisfacción, legítimos me parece.

De entre todos los carteles expuestos saldrá además la imagen promocional de Terras Gauda para los próximos años, no debe ser fácil escoger entre tantas propuestas de calidad. 

Es dificilísimo, pero siempre hemos tenido muchísimos apoyos. No puedo ni debo olvidar aquellos primeros años con la vanguardia de la creación gallega. Pienso en Antón Llamazares, en Virxilio, en Manuel Buciños, en Quesada… Y poco a poco esto se ha ido enriqueciendo con los grandes diseñadores de España, desde Javier Mariscal, Alberto Corazón, Óscar Mariné, Pepe Jiménez, Manuel Estrada… No quiero dejarme a ninguno, están también volcadísimos con el concurso.

También hemos tenido un cierto aprendizaje para llevar el concurso a buen término con un jurado en perfecta armonía, con los ganadores de otros años, medios de comunicación… Y aún así es dificilísimo. Yo siempre les digo a los miembros del jurado: es que si volviéramos mañana a reunirnos, diríamos ¡pero cómo nos dejamos este cartel fuera, dios mío! Pero es que si vuelves al día siguiente te pasa a lo mejor lo mismo. Desde luego, siempre hay una dosis de subjetividad.

La subjetividad parece inevitable al hablar de arte.

Pero lo que no duda nadie es que los carteles que han sido premiados en todas estas ediciones son todos ellos carteles excelsos. Que quede alguno fuera alguno que debería estar, eso puede ser.

En todo caso, parece que el concurso se ha convertido en un homenaje de nivel para el hombre que le da nombre. 

Francisco Mantecón estuvo desde que fundamos la bodega trabajando y entusiasmado con la idea como estábamos todos. No se le oculta a nadie que los primeros años no fueron fáciles y cuando comenzamos a ver la luz al final del túnel fue cuando desapareció prematuramente una persona que era un creador maravilloso, excelente amigo y mejor persona… Eso fue lo que nos llevó a dedicarle este concurso, si hay otro más allá nos estará aplaudiendo. En todo caso su viuda y su hijo esto lo ven, para ellos como para nosotros es una satisfacción enorme.

Desde luego habéis conseguido llevar su nombre por todo el mundo. Supongo que el concurso también supondrá una ayuda más en la estrategia de exportación de la bodega. 

Sin ninguna duda, al final ligar el mundo del vino con el mundo del arte no es ninguna novedad. Entre las grandes bodegas españolas y de otros países hay una tradición de cartelismo importante. En Galicia tenemos una tradición de cartelistas extraordinarios… El poder de otros medios como la televisión, de internet que parece que acaba con todo… Pero yo creo que un cartel buenísimo, que conjugue la creatividad con el mensaje publicitario… Es una cosa insustituible, una sola imagen que te deja boquiabierto

Desde luego, lo que demuestra este concurso es que la figura del bodeguero debe ser polifacético. Para cerrar, me gustaría preguntarle si la apuesta por el enoturismo también está siendo importante para Terras Gauda. 

No importante, importantísima. Obedece a una realidad que siempre se dio. Siempre hubo una identificación de los vinos y de sus marcas con un efecto descubrimiento en muchos consumidores. Eso los lleva a que forme parte de su acerbo, les gusta ver como se produce, por qué se produce, qué filosofía hay detrás de la producción… Esto viene desde siempre y se plasmó en los últimos años, hay una serie de películas y de cosas que han propiciado que esto sea así. En todo el mundo el enoturismo está siendo un hilo conductor para conocer los países a través del vino. La gastronomía y el vino forman parte de nuestra cultura desde hace miles de años, se explica por sí solo un fenómeno al que nosotros ahora mismo estamos prestando muchísima atención. Aunque solo sea desde el punto estrictamente egoísta tenemos que hacerlo porque el mercado va por ahí, así nos lo pide, pero es que además nos gusta hacerlo y que sea así.