La empresa emprendedora, “Go Below”, abrió sus puertas en abril de 2023 en la mina de pizarra más grande y profunda del mundo, donde la piedra se había extraído durante 200 años. Una red laberíntica de estrechos pasajes y túneles que conducen cada vez más profundamente bajo tierra. Y quien quiera alojarse en el hotel más bajo del planeta tendrá que llegar por sus propios medios al lugar de dormir, guiado por un guía.
@Go Below Underground Adventures 2025
Para ello, el operador proporciona a los huéspedes, entre otras cosas, un casco, una linterna frontal y botas especiales. Luego comenzará una caminata de 45 minutos a través del paisaje del Parque Nacional de Snowdonia hasta la entrada de la mina. El descenso dura aproximadamente cuatro horas en total y hay que utilizar una tirolina y, a veces, literalmente pasar por huecos estrechos.
tirolina, @Below Underground Adventures 2025
Aunque en Deep Sleep no hay agua corriente, el wifi está disponible gracias a un cable especial subterráneo de un kilómetro de longitud. No hay cobertura de teléfono móvil aquí abajo. El alojamiento incluye cuatro cabañas espartanas y la llamada “gruta”, una especie de habitación privada. Aquí abajo hay que enfrentarse una temperatura constante de sólo 10 grados centígrados. Se puede traer su propia comida para este viaje tan especial. El operador también ofrece un desayuno y una cena sencillos. Las opciones del menú se pueden ver en el sitio web oficial.
Acceso exterior del Hotel, @Go Below Underground Adventures 2025
El guía y un empleado técnico de la empresa permanecen con los huéspedes durante toda la noche. Sin embargo, el sueño será breve o nulo. Porque hay que levantarse de nuevo a las 8 de la mañana para empezar la agotadora subida de nuevo a las 10:30 a más tardar.
La “habitación” en uno de los camarotes cuesta 475 euros. La “Gruta” es aún más cara: 710 euros. Los niños deben tener 14 años o más para alojarse en el hotel más profundo del mundo. También es un desafío constante para el personal de Deep Sleep. Rehacer las camas a 419 metros de profundidad no es precisamente una tarea fácil.
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