​León Inevitable

|

     Tomo prestado para esta crónica el título de la obra de Victoriano Crémer, Cronista oficial de León, sobre esta provincia.


     Quiero comenzar con las palabras de Julio Llamazares que inician su libro “El río del olvido” «…Son las ocho de la mañana de un claro y caluroso día de agosto y León, la vieja ciudad gótica varada como un barco entre dos ríos, dos caminos y, ya pronto, dos milenios, se despereza con desgana bajo el primer rayo de un sol que ya asoma su cabeza ensangrentada entre los altos pinos de La Candamia…».

Esos y más matices se pueden encontrar en la ciudad de León

       Si el viajero llega en tren a la nueva estación, en pocos minutos puede acceder al centro neurálgico desde la plaza de Guzmán el Bueno, presidida por una estatua del personaje.


Plaza de Guzmu00e1n el Bueno Leu00f3n

Plaza de Guzmán el Bueno, León


      Desde ahí, dejando a la espalda la ribera del Bernesga, a lo largo de la avenida de Ordoño II recalará en la plaza de Santo Domingo. A la izquierda  de la fuente está el museo de León y a la derecha la iglesia de San Marcelo, con su imponente torre. Es recomendable entrar a ver su retablo churrigueresco.


Coche de carreras de Carlos u00c1lvarez Cuenllas IMG 7878

Coche de carreras de Carlos Álvarez Cuenllas, en la Avenida Ordoño II de León, (Foto: Antón Alonso)


      Si continúa por la plaza de San Marcelo, donde se alza el edificio del antiguo Ayuntamiento de la ciudad, junto al león que asoma por una alcantarilla al lado de efigie de Alfonso V (rey imprescindible  en la historia del reino de León), observará el contraste entre el Palacio de los Guzmanes que en la actualidad alberga la Diputación de León y el Museo Casa  Botines de Gaudí.


Leu00f3n, San Marcos y CASA BOTINES

Plaza e Iglesia de San Marcelo y Palacio de Botines, León


      Un corto y reposado paseo por la calle Ancha, en tiempos romanos, denominada vía p, desemboca en la plaza de Regla dominada por la Catedral de Santa María de Regla de León, magnífico ejemplo gótico declarado bien de interés cultural. Es obligada la visita de sus extraordinarias vidrieras, el claustro y el museo. 


Leou0301n Calle Ancha

León, Calle Ancha


      Pero la plaza de Regla alberga no sólo la maravillosa catedral leonesa, también cuenta con el edificio torreón que en la actualidad acoge las oficinas de recaudación de la Diputación provincial de León; el caserón museo Sierra y Pambley; el Obispado de León y la Cripta de Puerta del Obispo, restos arqueológicos del acceso oriental del campamento de la Legio VII. El viajero tiene que rodear la catedral y subir por la calle de las cien doncellas para contemplar la fachada del Hospital de Regla y regresar a la plaza para volver a recrearse en la portada de la catedral. Quizá sienta el deseo de convertirse en piedra y quedar eternamente observando el edificio en compañía del resto de esculturas que llenan el lugar.


Leu00f3n catedral frente

Fachada de la Catedral de León


     Para reposar después del paseo, es recomendable una visita a la Plaza Mayor. Allí, recuperará el aliento y refrescará el ánimo adentrándose en el Barrio Húmedo y la Plaza del Grano. Desde ese punto se puede rememorar la figura de Genarín, leyenda pagana del famoso pellejero inmortalizado en procesión por la cofradía fundada en su honor. Su historia es narrada por Julio Llamazares en su libro “El entierro de Genarín”.


Barrio Humedo de Lon, Carlos Cuesta

Barrio Humedo y PLaza de San Martín, León, (foto: Carlos Cuesta)


      Siguiendo la ruta de tal procesión pagana, que curiosamente se rememora todos los Jueves Santos, el viajero atravesará el barrio romántico, pegado a la muralla hasta el arco de la cárcel, donde es preciso hacer una parada en el museo romano para conocer la historia de la Legio VII Gémina que permaneció asentada en la ciudad. Desde ahí, protegido por los muros de la antigua cárcel, encontrará la Plaza de San Martino donde tiene su entrada y pórtico la Real Colegiata de San Isidoro, hoy convertida en hotel.


San Isidoro noche, Leu00f3n

Colegiata de San Isidoro, (foto: Antón Alonso)


      Rodeando sus muros el viajero estará en la fachada principal de la capilla sixtina del arte románico, la Basílica de San Isidoro, cuna del parlamentarismo europeo debido a que en el año 1188 se celebraron en ella las primeras Cortes conocidas de la historia. No puede dejar de visitar el museo y el Panteón Real con la representación de todos los meses del año en alegorías de las labores del campo.


Panteon Real de la Colegiata de San Isidoro de Leu00f3n

Cúpula del Panteón Real de la Colegiata de San Isidoro de León


      Deslumbrado por tanta historia contenida en esos muros y protegido del sol del mediodía, el viajero llegará a la Gran Vía de San Marcos en la Plaza de la Inmaculada y se sentirá atraído por la fachada plateresca del edificio que se alza al fondo de la calle. El Hostal de San Marcos, antiguo convento que hoy es uno de los paradores nacionales más preciados de la península. También fue prisión en la que permaneció cuatro años el poeta del Siglo de Oro, Francisco Quevedo.


León SAN MARCOS. Peregrino. 1523

Peregrino contemplando el Hostal de San Marcos, León 


      Si puede darse un capricho, seguro que se parará a degustar la cocina típica con los embutidos y excelentes vinos de la región y quizá hacer noche para visitar el cercano MUSAC ( Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León)            y recorrer los muchos rincones que aún esconde la ciudad.


Leu00f3n MUSAC, Antu00f3n Alonso

León, Fachada del MUSAC (foto. M. González Sobrado)


      Si la visita es de un solo día, desde allí, cruzando el puente romano llegará al barrio del Crucero, donde vivió el premio Cervantes Antonio Gamoneda y, por la orilla del Bernesga, a través del parque de Quevedo, caminará en busca del ferrocarril.


      De cualquier forma, seguro que el viajero llevará anotada en su agenda una nueva visita a la provincia para disfrutar de pueblos como Sahagún o Astorga que no le van a la zaga a su capital en historia romana y en arte, en pleno camino de Santiago. 


Sahagu00fan, Retablo Renacentista de Joara, en la iglesia de San Andru00e9s (s. XII) obra de Cristobal de Colmenares del 1541

Retablo Renacentista de Joara, en la iglesia de San Andrés (s. XII) obra de Cristóbal de Colmenares del 1541, que junto con otros nueve forma parte de La Ruta de Retablos Renacentista del Este de León (foto: Antón Alonso)


     Por no hablar de las médulas en Ponferrada, las pallozas, Villablino, cuna de Luis Mateo Díaz, otro reciente premio Cervantes, Babia y, por supuesto, la parte norte de la provincia con las cuevas de Valporquero, las estribaciones de los Picos de Europa y Riaño. Hacer un catálogo exhaustivo de todo lo que se puede visitar precisaría de muchos capítulos. Muchos de ellos ya están descritos por Julio Llamazares en su libro “Distintas maneras de mirar el agua”, dedicado en buena parte al pueblo donde nació y que fue inundado para construir un pantano.


LAS Mu00c9DULAS 1640, con todos los permisoa

Las Médulas en Ponferrada


      De regreso a la estación, pasando por el edificio antiguo convertido en museo, una última mirada del viajero a la avenida de Ordoño II, con las torres de la catedral al fondo y el dedo de Guzmán señalándola. En las poco menos de dos horas, lo que dura el trayecto en AVE hasta Madrid, podrá repasar el poemario de Gamoneda que lleva en la mochila.



Luis Maru00edn VyC

Autor: Luis Marín Domínguez








Fuente de Santo Domingo, León
Fuente de Santo Domingo, León

San Marcelo, retablo churrigueresco.
San Marcelo, retablo churrigueresco.

Plaza de San Marcelo, Leon
Plaza de San Marcelo, Leon

El palacio de los Guzmanes, Fachada León AAS
El palacio de los Guzmanes, Fachada León AAS

Iglesia de San Lorenzo, Sahagún
Iglesia de San Lorenzo, Sahagún

Retablo en la Iglesia de San Lorenzo, Sahagun, foto Anton Alonso
Retablo en la Iglesia de San Lorenzo, Sahagun, foto Anton Alonso

Astorga, Catedral y Palacio de Gaudí
Astorga, Catedral y Palacio de Gaudí

Comentarios