Viena es una de las ciudades del mundo que tiene más museos e instituciones culturales por metro cuadrado. El “Museums Quartier” o Barrio de los Museos, que ocupa el centro de esta ciudad, en el emplazamiento que antaño fueron las caballerizas imperiales de los Habsburgo, es uno de los mayores espacios culturales del planeta y, por tanto, un destino de turismo cultural único. Aquí, encontraremos edificios barrocos junto a otros modernos que conviven en armonía y brindan una oferta cultural, de ocio y artística, sin parangón.
Barrio de los Museos, @WienTourismus-Christian Stemper
Entre los numerosos museos por visitar en esta zona, se encuentra el “Kunsthistorisches Museum” (KHM), el Museo de Historia del Arte, uno de los más destacados del mundo en su género. Unidos a éste a nivel institucional, aunque ubicados en palacios diferentes, se localizan dos lugares excepcionales: el “Weltmuseum”, museo de antropología de impresionante colección y la “Schatzkammer” o Tesoro imperial, en la parte más antigua del palacio imperial (Hofburg).
Palacio Schönbrunn, Viena
Museo de Historia del Arte, Viena
Este suntuoso Museo, de enormes dimensiones y estilo neoclásico, situado en la imponente Maria-Theresien Platz (donde se encuentra la estatua de la monarca) y enfrente de su gemelo arquitectónico, el Museo de Historia Natural, acoge una de las colecciones de pintura renacentistas más relevantes del mundo. Fue concebido y construido, bajo el impulso del emperador Francisco José I, en la segunda mitad el siglo XIX (las obras duraron 20 años), como museo para las colecciones imperiales de los Habsburgo. Estos eran célebres por ser grandes coleccionistas y mecenas artísticos, durante 600 años. El famoso pintor Gustav Klimt participó, cuando iniciaba su carrera, en las bellísimas decoraciones murales del Museo, que llaman tanto la atención como las propias obras expuestas, formando un conjunto armónico.
Un Museo, donde destaca su impresionante vestíbulo y su escalera principal, donde está expuesta la grandiosa escultura de Antonio Canova, de estilo neoclásico, mandada realizar por Napoleón. Representa a Teseo combatiendo el Centauro, o sea la razón o civilización contra la barbarie.
El KHM se compone de una importantísima pinacoteca, con grandísimas obras renacentistas. Las colecciones se componen de pintura flamenca (Rubens, Van Dyck…), neerlandesa (Rembrandt, Vermeer…) y alemana (Lucas Cranach...), donde destaca la mayor colección del mundo de obras de Pieter Bruegel, el Viejo (la preciosa La Torre de Babel es uno de sus cuadros expuestos). También, son destacables las colecciones de pintores italianos (sobre todo del s. XVII), españoles y franceses con grandísimos artistas como Arcimboldo, Tiepolo, Sanzio, Canaletto, Caravaggio, Giordano, Veronese, Tintoretto o Tiziano, entre otro. El KHM alberga, de hecho, la mayor colección de pintura veneciana del mundo.
Pinacoteca del KHM, @GregorHofbaur
Muy destacables, los diversos retratos que Velázquez hizo a la infanta Margarita de Austria. Están considerados entre los mejores del mundo en este género de pinturas de niños infantes, en la historia de las Bellas Artes. La galería de retratos del Renacimiento, expuesta en este museo, es de las más notables a nivel internacional.
Retratos pintados por Velázquez en el KHM
Además de la impresionante pinacoteca, se puede visitar en el KHM, una interesante colección de Numismática, la colección egipcio-oriental y otra de antigüedades. Tanto la armería imperial como la colección de instrumentos musicales históricos pertenecen, así mismo, al grupo del Museo de Historia del Arte, aunque en dependencias separadas.
Y, qué mejor, que combinar gastronomía con arte en el impactante Café-restaurante del Museo con su cúpula a la que no se puede dejar de mirar. Se impone tomar un refrigerio o comer en tamaño decorado para sumergirnos en el más puro ambiente imperial de lujo y oropeles.
Café del KHM, Viena
Aquí, podremos degustar, en un ambiente refinado y relajante, dulces o recetas típicas vienesas como el espectacular escalope vienés (wiener schnitzel), maravillosamente elaborado, en este caso.
Escalope vienés del Café del KHM
Esta Cámara del Tesoro está considerada como la más importante del mundo. Aquí se guardan los grandes tesoros Reales de los Habsburgo, excepcionales obras de arte e insignias imperiales que han marcado este Imperio del occidente cristiano y del Sacro Imperio Romano Germánico. De esta forma, se pueden admirar dos Coronas Imperiales, la Espada Imperial, el Manto de la Coronación, los Cetros Imperiales. Están expuestas, por ejemplo, la corona del emperador Rodolfo II (que, luego, sería la corona del imperio austriaco), la cuna del hijo de Napoleón y de María Luisa de Austria- Rey de Roma y tempranamente fallecido- y la mayor esmeralda tallada por mano humana, hasta el momento, elaborada en 1641 por Dionysio Miseroni. El tesoro de la Orden de caballería del Toisón de Oro se encuentra aquí expuesto, así como diversas joyas auténticas de emperadoras y princesas (algunas de Sisí). También, existen salas dedicadas al interesante tesoro sacro o eclesiástico. En definitiva, visitar el Tesoro Imperial de Viena es viajar durante muchos siglos por la historia de Europa.
Corona de Rodolfo II en la Schatzkammer@GregorHofbaur
El Weltmuseum como su propio nombre indica es un museo del mundo. Aquí, precisamente en Viena, una ciudad de espíritu internacional (una de las sedes mundiales de las Naciones Unidas se localiza en la capital austriaca) tienen cabida casi todas las culturas del resto de los continentes, con objetos e información, presentados desde una óptica antropológica.
Weltmuseum, Viena
La entrada del Museo- La Sala de columnas- es de gran belleza con su patio interior en mármol blanco, donde, además, hay un Café. Existen, también, salas dedicadas a exposiciones temporales.
De gran tamaño- el museo tiene 14 salas muy nutridas-, es conveniente tomar su tiempo para visitarlo con calma. Las salas están consagradas a colecciones de diferentes partes del mundo, que datan desde el siglo XVI. En ellas, se exponen adornos, penachos indios (como el de Moctezuma), trajes, objetos de decoración, etc. Colecciones que provienen desde numerosos países de Oriente (Indonesia, Islas de los Mares del Sur, Ceilán, India, Japón, China…), pasando por Africa (Egipto…) o Australia hasta llegar a América con las civilizaciones de Mesoamerica, las indias de Norte-América o Brasil.
Weltmuseum y Oriente, @PaulBauer
Junto a esta mirada al mundo de las grandes etnias y pueblos, encontramos salas dedicadas a una reflexión crítica sobre el papel de Austria en el colonialismo que, pese a lo que se pueda pensar, fue de cierto relieve. Podemos leer, por ejemplo, cómo a pesar de no tener territorios directamente, Austria extendió su poder político más allá de sus fronteras, durante los Habsburgo, a través de las alianzas matrimoniales. Esto sirvió, por ejemplo, durante el reinado de Francisco I, para ampliar sus colecciones de arte y sus tesoros que recuperaron en viajes y expediciones por todo el mundo y, que, hoy, podemos admirar en el cosmopolita Weltmuseum.
Weltmuseum, Viena
¿Dónde alojarnos en nuestra visita a Viena?
-Hotel Gilbert
El Hotel Gilbert es una opción perfecta para alojarnos en un establecimiento ubicado con acierto, en el centro de Viena, a dos pasos del Barrio de los Museos y de una céntrica boca de metro, la de Volkstheater. Pero, además, con la ventaja de estar situado en una pequeña calle tranquila (Breite Gasse 9) de un agradable barrio, que, unido al ambiente placentero del hotel, nos permitirá una estancia relajante. Habitaciones confortables, bonitas, silenciosas: un hotel amable, con buenas vibraciones y mejor espíritu, con correcta relación precio-calidad.
Gilbert es, así mismo, un modelo de establecimiento ecológico y sostenible con su fachada verde y su interior lleno de numerosas plantas en las zonas comunes (una persona del servicio del hotel se dedica cada semana durante dos días al mantenimiento de estas plantas) y en las habitaciones, donde siempre hay un detalle vegetal.
Fachada verde del Hotel Gilbert, Viena (c) Wolf Dieter Grabner
También, en uno de los patios al aire libre, existe un huerto, que se ve desde muchas de las habitaciones. La vegetación exterior de la fachada aísla del ruido al hotel y contribuye a la limpieza del aire y la refrigeración natural de la casa, además de servir como hogar para abejas y pájaros. Desde 2021, el Hotel Gilbert es ya parte de la imagen moderna y ecosostenible de Viena. El año pasado, fue distinguido como mejor alojamiento sostenible de Europa central en los GrINN Awards.
Buenos desayunos y el restaurante del hotel, &Flora, ofrece una carta de platos internacionales y, algunos, vegetarianos.
Más información:
Vienna City Card: https://www.wien.info/en/travel-info/vienna-city-card
Oficina de Turismo de Austria:
Autora: Carmen Pineda
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