Más vale tarde que nunca

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Fernando Gonzalez

El pasado lunes, 15 de junio, se abrieron los pasos fronterizos de Arbo-Melgaço, Salvaterra-Monçao y Tomiño-Vila Nova de Cerveira, en horario de 08:00 a 22:00 horas, y con controles policiales hasta el 1 de julio, fecha en la que está prevista la apertura sin restricciones de las fronteras interiores hispano-lusas.


   Causa tristeza saber que casi desde el inicio del Estado de Alarma, centenares de empresas y políticos de la zona estuvieron luchando para reducir cuanto antes, los perjuicios económicos y de tiempo a millares de trabajadores transfronterizos que no tenían más alternativa que cruzar el Puente Internacional de Tui-Valença do Minho.


   Asimismo, el Delegado de Gobierno en Galicia, anunciaba dicha reapertura el 11 de junio, y en dos o tres días ya había policías nacionales de sobra asignados a estos tres nuevos pasos. ¿Por qué no se aprovechó la abundante disponibilidad de efectivos policiales, para realizar desde el inicio del confinamiento, los pertinentes controles fronterizos en estas zonas densamente pobladas?


   Otra de las sorpresas, fue el mantenimiento del retraso de la apertura total de la frontera entre España y Portugal para el 1 de julio, mientras que nuestra Nación adelantaba al 22 de junio la reapertura de fronteras interiores con el resto de países de la Unión Europea.  Todo ello, cuando ambos vecinos ibéricos tienen una buena red de control y seguimiento de los nuevos contagios diarios que llevan varias semanas oscilando entre 50 y 400. ¿Acaso no hubiese sido mejor que el 22 de junio, los ciudadanos de estas dos naciones hermanas, pudiesen haber cruzado libremente la frontera para poder disfrutar un tiempo de ocio o vacaciones, y así poder haber gastado su dinero en los comercios, restaurantes, hoteles, atracciones y demás servicios de sus respectivos países vecinos?


   Sí, es verdad, más vale tarde que nunca, pero el retraso en estas decisiones fáciles de ejecutar, ha generado mucha ansiedad e importantes pérdidas económicas a muchos “currantes” de las zonas fronterizas. 

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