No relativicemos

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Jacinto Seara 202

La ‘pandemia del COVID-19’ ha hecho que nuestras vidas a nivel mundial se transformen, cómo ha sucedido ante hechos Importantes que afectaron a todo el mundo o a la mayor parte. Ciertamente saldremos de ésta que nos ha tocado vivir de forma diferente, posiblemente si somos sensatos y no actuamos como en las últimas décadas, saldremos con más libertad e igualdad por las que ha luchado la humanidad desde sus inicios. No dejemos pasar la ocasión y no hagamos caso de los ‘cantos de sirena’ con lo que nos están bombardeando desde todos los lugares, incluidos científicos que sin motivación demostrada se inclinan por principios que nos conducen a un estado en el que por el bien público sólo unos pocos tienen voz y voto. Vemos el cierre de industrias por razones ideológicas, ejemplos tenemos en las Centrales Nucleares o en la industria automovilística, entre otros, que están fundamentados en lo que se conoce cómo ‘ODS’ (Objetivos de Desarrollo Sostenible) que desarrolló la ONU y ha sido aceptado por los gobiernos occidentales. 


Así para la industria existe un documento llamado ‘Industria Inclusiva y Sostenible’ con el objetivo de “integrar sectores rezagados con aquellos avanzados”, podemos pensar en supresión de los automóviles de gasoil o gasolina por el eléctrico (lo acabamos de ver en los cierres de Nissan o Alcoa), con la destrucción de puestos de trabajo de las que no cumplen el principio antes enunciado en la ‘ODS’ y que significa un cambio estructural no sólo en la industria si no también en la población, que de seguir así cada vez tendrá menos recursos, por lo que sobran especialmente los mayores que sólo generan gastos en pensiones y sanidad.


No tenemos que abandonar nuestros principios, la base fundamental es el diálogo y ‘ver’ que es lo mejor para la mayoría de ciudadanos, y que afecte lo menos posible a las minorías, porque hay que tenerlos en cuenta. Es difícil si seguimos el camino del sectarismo que nos están marcando las élites mundiales a través de todos los medios de que disponen, que son muchos. Por ello debemos ser resilentes ante situaciones-emociones adversas ante lo que estamos viviendo en las últimas centurias, y que se ha acelerado con ardor en el último quinquenio, y mucho más con la ‘guerra’ del Covid-19 cómo excusa.

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