Zaragoza, mucho más allá del Pilar
- Zaragoza un destino peculiar para el visitante: una ciudad a la que los acontecimientos históricos se empeñaron en arrebatar casi toda su historia y en la que ahora encontramos... mucha historia.
Los orígenes de Zaragoza hay que buscarlos en el siglo VII a. C., cuando se asentaba en la zona una tribu de la Edad de Bronce. Más tarde se tiene constancia de un asentamiento íbero en el siglo III a. C., el historiador romano Plinio el Viejo lo identificó como Salduvia.
En los primeros años del siglo I se instalaron a orillas del río Ebro los romanos, dándole a la ciudad el nombre de Caesaraugusta, en honor del emperador César Augusto.
Estatua en honor del emperador César Augusto junto a la Plaza del Pilar
Después de los romanos, Zaragoza fue ocupada por suevos y visigodos, además de los asedios proferidos por francos y vascones. Hasta que en el siglo VIII se hicieron con ella los musulmanes, convirtiéndose en la capital de la Taifa de Saraqusta en el año 1018. Del período de mayor esplendor de la dominación árabe, hoy en día se conserva el Palacio de la Aljafería.
Palacio de la Aljafería
Aunque cambió de manos varias veces, el control islámico duró hasta el siglo XII, cuando el rey Alfonso I el Batallador conquistó la ciudad en el año 1118, convirtiéndola en la capital del Reino de Aragón.
- La ciudad atravesada por el Ebro
Hay que dejarse llevar por los aires del Ebro y descubrir así los secretos que esconde Zaragoza.
Íberos, romanos, musulmanes, judíos y cristianos dejaron su impronta en esta ciudad bimilenaria que invita a perderse por sus calles y disfrutar del carácter acogedor y abierto de sus gentes.
Pasarela y estación del AVE, Zaragoza
La capital de Aragón te ofrece un recorrido por la historia y la cultura, de la antigua Roma al arte Mudéjar (declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO), pasando por el Renacimiento a la Zaragoza de los Sitios. Festival de festivales: Asalto, Trayectos, Slap!, Jazz, Lagatavajunto, de Circo,… mercados, mercadillos, actividades, talleres, exposiciones y mucho más.
- Zaragoza es un cruce de caminos, de culturas…y de sabores. Tradicional y de vanguardia, la gastronomía es un reflejo de sí misma y de sus gentes.
Pasear por las riberas, por el parque José Antonio Labordeta o el Parque del Agua, el único de carácter estepario de Europa o disfrutar de sus alternativas de ocio, pueden ser un buen plan para completar la escapada en la ciudad.
Paseo Principal del parque José Antonio Labordeta o el Parque del Agua
>> Imprescindible
- Zaragoza es una ciudad auténtica, hospitalaria y cargada de tradiciones.
El Casco histórico de Zaragoza es uno de los más extensos de España e invita a un viaje en el tiempo a lo largo de más de 2.000 años…
En pleno casco histórico de la ciudad se pueden encontrar los bares más castizos de Zaragoza, pero también los más modernos y hipsters. Es un barrio de contrastes, donde se juntan las típicas tascas con los bares más innovadores como el Mandanga de la buena, la última novedad.
En la Plaza de las Catedrales, la Basílica del Pilar te da la bienvenida y te invita a descubrir la historia de la venida de la Virgen a Zaragoza, según la tradición - se trata del primer templo mariano cristiano, puesto que en él se conserva y venera el pilar -en realidad una columna de jaspe- que, fue puesto por la Virgen María quien, viviendo en Jerusalén, se había aparecido en carne mortal al apóstol Santiago el día 2 de enero del año 40, en su interior se pueden contemplar
las obras de Goya y disfrutar de las maravillosas vistas subiendo al ascensor de la torre de San Francisco de Borja.
La Catedral - Basílica del Pilar de Zaragoza
Si el muro de la Parroquia de La Seo, obra cumbre del arte Mudéjar aragonés, sorprende, espera a ver su perfecta combinación de estilos, que van desde el románico al neoclásico y la impresionante colección de tapices flamencos.
Catedral del Salvador de Zaragoza es una de las 2 catedrales, de Zaragoza, junto con la basilíca y Catedral del Pilar. Habitualmente es llamada "La Seo" en contraposición a "El Pilar"
La Aljafería, el palacio musulmán más al norte de Europa, te hará viajar a través del tiempo y de la música, porque en su torre del Trovador Verdi sitúa la trama de la opera Il Trovatore. Este maravilloso edificio, junto a la Seo y la iglesia de San Pablo han sido declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO por su Mudéjar, estilo arquitectónico único que recoge la influencia y tradición de los artistas musulmanes.
Zaragoza, iglesia de San Pablo
Ciudad de tradición, pero también de vanguardia. La zona expo te descubrirá maravillosos ejemplos de arquitectura moderna como el Pabellón Puente de la prestigiosa arquitecta Zaha Hadid, la Torre del Agua o el Acuario Fluvial, el acuario de agua dulce más grande de Europa.
Torre del Agua, Zaragoza
>> Muévete
La Estación Intermodal Zaragoza Delicias se sitúa al oeste de la ciudad y presume de ser una de las estaciones más grandes de España. Alberga la estación de cercanías, trenes de media y larga distancia y la estación central de autobuses.
Estación Intermodal Zaragoza Delicias
En una hora y media desde Madrid y menos de dos horas desde Barcelona, Zaragoza es perfecta para una escapada en cualquier época del año. Desde la estación podrás llegar rápidamente al centro en transporte público o subir al bus turístico que te acercará a algunos de los rincones más emblemáticos de la ciudad.
Participar en una visita guiada o perderse por las calles del casco histórico puede ser un buen plan aunque también puedes disfrutar de los más de 100km de carril bici y recorrer Zaragoza sobre ruedas.
>> Alternativa
Zaragoza es una de las pocas ciudades romanas que goza del privilegio de llevar el nombre de su fundador, Cesar Augusto y de su época romana sus calles esconden secretos como la muralla y la ruta de Caesaraugusta: el teatro con capacidad para 6.000 personas, el foro que era el centro neurálgico de la ciudad, las termas públicas y el puerto fluvial.
Restos de la Muralla romana, Zaragoza
También descubrirás sus palacios renacentistas, en la ciudad hubo más de 200 por lo que Zaragoza era conocida en el s. XVI como la Florencia española. Ahora albergan exposiciones como La Lonja, el Palacio de los Condes de Sástago, la Casa de los Morlanes, entre otros.
La Casa palacio de los condes de Sástago, Zaragoza
- La amplia y variada oferta museística te llevará a descubrir las obras de los escultores aragoneses Pablo Gargallo en el Palacio de Argillo o Pablo Serrano en el Instituto Aragonés de Arte Contemporáneo, varias pinturas y la colección completa de grabados de Goya en el Museo Goya – Colección Ibercaja, el Museo de Ciencias Naturales de la Universidad de Zaragoza, el Alma Mater Museum y las diversas actividades y talleres que organizan, las exposiciones itinerantes y el maravillo edifico de CaixaForum y también museos tan sorprendentes como el Museo del Fuego y de los Bomberos o el EMOZ (Escuela Museo de Origami de Zaragoza), el primer museo dedicado al arte del plegado de papel de Europa.
Zaragoza, Museo del Fuego
>> Para saborear
Hablar de gastronomía en Zaragoza es hablar de la calidad de los productos típicos de la zona: la borraja, reina de la huerta; el bacalao, con gran tradición en el interior; el ternasco, a mitad de tamaño entre el lechal y el cordero; el jamón de Teruel, las verduras en general y en temporada las setas y la trufa; todo ello regado con vinos de cuatro DO y seis zonas vitícolas de la tierra, repletos de premios internacionales… De la gran variedad de establecimientos, del buen hacer de sus profesionales y de la cultura del tapeo.
- ¿Sabías que el primer concurso de tapas de España se celebró en Zaragoza en 1994?
Hay lugares repartidos por toda la ciudad y su ejemplo más conocido es la zona de El Tubo en pleno casco histórico, uno de los principales puntos de encuentro para el tapeo zaragozano y de ineludible visita para todo aquel que pasa por la ciudad. Mención especial para el Juepincho, tapear los jueves en los bares de las zonas de Heroísmo y la Magdalena, sumado al buen ambiente que se respira, es una buena alternativa.
Lo cierto es que en Zaragoza se come con una magnífica relación calidad precio, de las mejores de España, sin duda alguna.
La ciudad que vio nacer alguno de los restaurantes más antiguos de España, que exportó cocineros al resto del país y se convirtió, a principios del siglo XX, en parada obligada para reponer fuerzas, ha continuado evolucionando al ritmo de la ciudadanía. De hecho cuenta con diferentes establecimientos que han alcanzado los lugares de honor en las guías especializadas más prestigiosas.
Un buen plan puede ser participar en una visita gastronómica, visitar lugares tan especiales como la antigua fábrica de la Zaragozana, dónde descubrirás el origen de la cerveza Ámbar o descubrir la parte más dulce de la ciudad con el Chocopass.
Cubas de Maceración, en La Zaragozana
>> No te puedes marchar sin
No te vayas de Zaragoza sin…
Disfrutar de un paseo por el casco urbano y descubrir desde tiendas de diseño hasta galerías de arte, anticuarios, firmas de moda, tiendas gourmet y confiterías donde llevarte un dulce recuerdo de la ciudad o disfrutar de los mercados y mercadillos: de antigüedades, libros, numismática, verduras y hortalizas, y una infinidad de artículos, como el de la plaza de Las Armas, plaza de San Francisco o plaza de San Bruno.
Admirar Zaragoza desde las alturas, la torre de la iglesia mudéjar de San Pablo, la torre de la Basílica del Pilar, Uno de los mejores miradores que se pueden encontrar en Zaragoza es una de las torres que forman el símbolo por excelencia de la ciudad: El Pilar. En concreto es la torre que está situada junto a la puerta trasera del monumento y que permanece abierta todos los días para ofrecer una espectacular panorámica de la población con el río a sus pies. La subida se realiza en un ascensor de cristal que permite a los visitantes tener una magnífica vista mientras se asciende hasta los 63 metros de altura. Otra de las características de este ascensor panorámico es que la subida se realiza tan sólo en 20 segundos, mientras los visitantes van dejando un ‘mar de cúpulas’ a sus pies, tambien el Torreón de la Zuda te regalará una de las mejores panorámicas de la ciudad.
Las Torres, del Pilar
Correr, patinar, ir en bici o pasear por el Canal Imperial de Aragón te mostrará el lado verde y natural de Zaragoza. Cruzar el puente de Piedra hasta el balcón de San Lázaro para llevarte como recuerdo una fotografía del puente y la Basílica del Pilar.
Canal Imperial de Aragón
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