Nacho Jacob

Nacho Jacob

Un año más jóvenes universitarios de diversos centros españoles han seleccionado a los 500 hombres y mujeres más influyentes de nuestro país. Por primera vez entre los seleccionados se encuentran un asesor de imagen como Nacho Jacob, también conocido como Ignacio de Jacob y Gómez, entre personalidades como Ana Patricia Botín, presidenta del consejo de administración del grupo Santander, Amancio Ortega, empresario, Isak Andic, empresario español, Alicia Koplovich, empresaria y financiera española, Florentino Pérez, empresario, José Segarra, fiscal del estado, Josú Jon Imaz, presidente de Repsol, José María Alvarez-Palete, presidente de Telefónica, entre otras figuras destacadas del panorama social, cultural, político y financiero.

Nacho Jacob está reconocido como el mejor asesor de imagen español y un auténtico maestro del arte de las relaciones públicas, con unas habilidades sociales y poder de influencia fuera de lo habitual. Y no es para menos, su agenda está completa hasta el año 2025.

Desde que inició su carrera, hace ya 20 años, ha organizado más de 1000 eventos por todo el mundo, desde Marrakech a Paris, de Nueva York a Roma o de Miami a Moscú.

Ha trabajado para las firmas nacionales e internacionales más prestigiosas ofreciendo unos resultados espectaculares como Disney, Axe, Play Station o Coca-Cola y por sus alfombras rojas han pasado personalidades de la talla de; Leonardo Di Carpio, Martin Scorsese, Susan Sarandon, Sigourney Weaver o Eros Ramazzotti, entre otros muchos.

Este auténtico influencer, ha sido recibido en audiencia privada por tres papas San Juan Pablo II, Benedicto XVI y el Papa Francisco, y ha acudido a recepciones con Bill Clinton, Isabel II de Inglaterra, los Reyes de Jordania, el Rey Mohammed VI de Marruecos, Bill Gates, Mark Zackergerg o el desaparecido fundador de Appel Steve Jobs. 

Asesor de imagen de innumerables celebridades en sus redes sociales se le puede ver con deportistas como Sergio Ramos, Iker Casillas, Fernando Torres, Feliciano López o Fernando Verdasco, con artistas como Julio Iglesias, Raphael, Miguel Bosé, José Coronado, Concha Velasco o Paz Vega, también con figuras de la cultura como Mario Vargas Llosa o Antonio López.

Por si esto fuera poco ha recibido numerosos premios y reconocimientos como el premio Perséfone, entregado por el académico de RAE , Luis María Ansón, la Gran Cruz de Santiago, otorgada por la Asociación Nacional de la Guardia Civil, con la medalla al mérito humanitario de Andalucía o la Paloma de La Paz, otorgada por el Padre Ángel García , presidente de la fundación “Mensajeros de La Paz” por su contribución de forma desinteresada durante más de 10 años en comedores sociales, recogida de alimentos, asistencia de ancianos y relaciones públicas para obtención de ayudas y subvenciones públicas y privadas.

P. - ¿Cuál es el principal mérito en su vida?

NJ: En primer lugar debo de decir que soy un verdadero privilegiado, aunque cada día tengo que afrontar convivir con una enfermedad de las esas que califican “rara”, llamada Fibromialgia, esta enfermedad te resta muchísima calidad de vida, desde que te levantas sientes un agotamiento físico como si hubieras corrido una maratón, sientes una constante pesadez en los ojos y una extrema falta de vitalidad, yo lo comparo con los síntomas de una gripe, como cuando tienes fiebre y dolores musculares; en el caso de una persona “normal” ‘estos síntomas duran de 3 a 4 días, en mi caso, es algo crónico; pero no por ello, dejo de sonreír, basta con poner la televisión y ver los auténticos dramas que padecen otros seres humanos, como el hambre, las injusticias y las guerras; o dar un paseo por las calles para ver en la propia capital de España mucha gente sin techo y con graves problemas de integración, por eso mismo me reitero de que a pesar de mi dolencia soy una persona afortunada y por ello doy gracias a Dios. Y ese es mi principal mérito, levantarme cada día con ganas de emprender y luchar, de conquistar mis metas y ser mejor, aunque me duela hasta respirar.

P. - ¿Te ha sido fácil llegar tan alto en tu profesión?

NJ: Te voy a ser muy sincero, me ha costado muchísimo. Estaba predestinado a ser abogado como mi padre, de hecho, él mismo con 18 años me inscribió para realizar la carrera de Derecho en la Universidad Complutense de Madrid para que siguiera sus pasos, los de mi hermano y los de mi abuelo, pero fue un auténtico desastre (entre risas), ¡suspendí absolutamente todas! Realmente no tenía ninguna motivación de estudiar esa carrera, pero el destino me llevo a conocer el mundo de la imagen y las relaciones públicas, que mi padre en un principio veía como un agravio a la familia y tuvimos duros enfrentamientos por ese motivo, puesto que en su mentalidad conservadora no entendía como su hijo podía estar recepcionando invitados en un evento y decía enfadado que eso era cosa de un Maître y no de su hijo. Con el tiempo, mi padre que era muy buena persona fue entendiendo que la imagen era mi pasión y que yo era feliz. Luego me costó bastante ser aceptado por algunos periodistas que me veían como un “niño pijo”, pero poco a poco descubrieron que era un “currante” y que me quería abrir camino en este complejo mundo y los que estaban recelosos me tendieron la mano, así como muchos rostros populares que me ayudaron al principio de mi carrera y a los que estoy muy agradecido, y por supuesto a mis clientes que han confiado y confían en mí.

P. - ¿Nos podrías decir cuáles son las claves al éxito?

NJ: Bueno, (entre risas) claves no existen porque no hay una ecuación para conseguir el éxito, sí que creo que puedo dar algunos buenos consejos.

En primer lugar y con esto me dirijo a los más jóvenes, que no saben qué camino escoger y andan perdidos, les diría que deben de delimitar un objetivo claro y preciso y visualizando cada hora, cada minuto y cada segundo, que no olviden jamás, y lo digo por propia experiencia, que lo barato sale caro y que lo rápido suele ser lo más lento. El camino al éxito se consigue siempre con paciencia y mucha perseverancia, no hay atajos.

También añadiría, que no se rindan nunca, que luchen con toda su pasión por sus sueños, que no les importe lo que digan los demás, lo que publiquen de ellos en las redes sociales o en los medios, es mejor no hacer caso a los enemigos que te salen en el camino y que en la mayoría de los casos solo buscan hacer un daño gratuito e injustificado.

Estos factores nunca los van a poder evitar, pero lejos de dañarte, te tienen que hacer más fuerte, y si hay algo que no te debe de faltar nunca para conseguir el éxito, es el amar lo que haces y la búsqueda constante de la excelencia.