
Tomar una copa de vino tinto al día puede hacer mucho por nuestra salud en general. Recordemos, siempre con moderación y equilibrio. Un vasito diario de este tributo natural y de hechizante sabor acompañará tus platos y mejorará notablemente tu bienestar. En
te explicamos por qué.
- Sirve para quemar grasas. Una de las cualidades del vino tinto es que es astringente, lo que lo coloca en el extremo opuesto a la grasa y elimina la sensación que produce una comida grasienta. Además, en diversos estudios realizados en EEUU se ha detectado que posee elementos en su composición que impiden la formación de células de la grasa.
- Es bueno para la circulación. Al igual que funciona contra las células de grasa, el vino tinto contiene colesterol, pero esto no significa que sea malo. De hecho, el tipo de colesterol que contiene puede prevenir problemas cardiovasculares y mejorar la circulación de la sangre si se toma una copa al día siendo mujer, o dos en el caso de los hombres.
- Contribuye a la higiene bucodental. Según estudios realizados en una universidad de Italia, el vino tinto contribuye a la salud de la boca y los dientes desinfectando las encías e impidiendo la actividad de distintas bacterias asociadas con la caries y la gingivitis.
- Mejora las funciones del cerebro. Numerosos estudios determinan que el componente antioxidante del vino, al reducir la inflamación del corriente sanguíneo, favorece el funcionamiento cerebral e incluso sirve para prevenir la demencia.
- Libera endorfinas. Las endorfinas son hormonas que al ser liberadas en el cerebro producen una sensación placentera en nuestro organismo. Al beber vino tinto, según una Universidad de California, se activa este proceso químico.
- Es útil contra el sedentarismo. Según el FASEB Journal, uno de los diarios de Biología más citados de Estados Unidos (y del Mundo), el resveratrol, una de las moléculas que contiene la uva, sirve para combatir los efectos negativos en el organismo de alguien que tiene una vida sedentaria.
- Reduce las posibilidades de tener cáncer. En concreto, de cáncer de pulmón a hombres fumadores, según diversos estudios. También, contra el cáncer de mama, impide el crecimiento de las células cancerosas; e incluso hay estudios que confirman que el consumo de una copa al día a partir de los 40 años elimina las posibilidades de contraer cáncer de próstata en un 50 por ciento.
- Combate las infecciones urinarias. Gracias sus propiedades antioxidantes y astringentes logra evitar que las bacterias se adhieran a nuestra vejiga o riñones y optimiza, además, el filtrado y depuración de estos órganos. Basta, como decimos, una copita al día para beneficiarnos de estas importantes dimensiones. ¿Te las vas a perder?

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