Christian Lacroix se pone bajo las directrices del grupo ourensano Sociedad Textil Lonia (STL) en lo que consideran, una gran apuesta por la continuidad de STL. La compra, de la que no han trascendido detalles económicos, supone una decisión empresarial de los hermanos Josefina, Jesús y Javier Domínguez que hace todavía más grande el proyecto nacido en Ourense y refuerza la apuesta por la innovación y el empleo. De esta forma, la compañía ourensana amplía su grupo de marcas y refuerza su presencia internacional en el mundo de la alta costura y el lujo.
Tienda de Christian Lacroix, Place Saint Sulpice, París, Francia.
Esta icónica casa francesa fue fundada en 1912 por Jean Patou, pero fue en los 80 cuando revolucionó la alta costura. La firma formó parte hasta 2005 de la cadena de lujo francesa Louis Vuitton Moët Hennessy (LVMH) y ahora estaba en manos del grupo multisectorial estadounidense Falic Group. A partir de ahora, la icónica marca de moda parisina será controlada por el grupo de los hermanos Domínguez, que también gestiona las marcas de Purificación García y CH Carolina Herrera.
Fachada de la tienda de Purificación García, en Ourense
Textil Lonia es una empresa líder en el sector retail textil, que nació en Ourense en 1997 como un proyecto textil con el foco en "el diseño, la producción y la venta de colecciones de ready to wear y accesorios". Así se recoge en la misión de la empresa ourensana, "nuestro objetivo principal es el desarrollo a largo plazo de marcas de moda a través de una red comercial propia con una clara vocación internacional".
STL ha destacado que existe una “fuerte conexión entre nuestra filosofía de creación y la artesanía”, tal como reconocía en un comunicado. En STL “admirábamos la visión, la magia y la artesanía de la Maison Lacroix, así que cuando surgió la oportunidad la aprovechamos con entusiasmo. Haremos todo lo posible para garantizar que el talento único de su creador y su inestimable contribución al mundo de la moda alcancen su máximo potencial”, expresan tras hacerse pública la compra de Lacroix. Asimismo, STL destaca la importancia de esta decisión empresarial adoptada desde Ourense, una adquisición que supone más innovación y empleo para Ourense. La empresa ya ha anunciado que ampliará sus instalaciones en el parque empresarial de Pereiro de Aguiar.
Por el momento, de la operación no han trascendido los detalles económicos, pero lo que sí se sabe es que el maestro de la costura que da nombre a la marca, Lacroix, ha dado su visto bueno a la venta y a la compra por parte de STL. Por su parte, tras marcar con su sello en la alta costura y las tendencias de moda en varias décadas, el modisto está centrado, a sus 73 años, en el diseño de vestuario destinado a lucirse en óperas. “La familia española propietaria de STL tuvo la delicadeza de ponerse en contacto conmigo antes del anuncio oficial sobre la adquisición del nombre y los archivos de Christian Lacroix. Probablemente nos reuniremos pronto de manera informal”, ha declarado el diseñador a Vogue Business .
El modisto Christian Lacroix, en su estudio en una foto de archivo.
En estos momentos, STL cuenta con más de 600 puntos de venta en 43 países y tiene una plantilla de 2.500 trabajadores. Además, el grupo liderado por los hermanos Domínguez y el grupo Puig presentó un beneficio neto de 55,5 millones de euros en su último ejercicio.
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