Aquí van algunos ejemplos para abrir apetito:
1. se ordena la demolición de una torre en una piscina pública por que le faltaban 5 cm para ser legal como torre olímpica. Los gastos de derribo se estiman en unos 2.000 euros.
2. Se tramita el arreglo de una curva peligrosa y al finalizar las obras se observa que sigue igualita como estaba antes pero, eso sí, mejor asfalto y aceras y medio millón de euros en inversión.
El caso más llamativo es de un funcionario municipal que estuvo cinco años trabajando en remoto, teletrabajo, cobrando en total 600.000 euros. ¿Cual es la queja? Que desde el ayuntamiento no le asignaban tareas a realizar en gestión de proyectos. En defensa del funcionario hay que decir que previamente se había realizado una fusión de dos ayuntamientos. El nuevo alcalde no tenía muchas ganas de tenerlo en el equipo, lo mandó para casa y que hiciese teletrabajo. Esperando órdenes superiores que nunca llegaron, el funcionario, con el tiempo se tomó la libertad de hacer hacer otras cosas en su horario de trabajo. Incluso estuvo dos meses en Canarias y nadie se ha dado cuenta.
Otro caso escandaloso fue la creación de un espacio público para el encuentro de los vecinos delante de un palacio de titularidad municipal en el norte de Alemania. Se gastaron alrededor de 1,2 millones de euros en remodelar esa plaza, eliminar el tráfico de coches y plantar árboles. Está bien dirán ustedes. Si, solo que se ha creado un espacio de reunión vecinal de solo 20 metros cuadrados.
Un proyecto en un municipio de Baviera de 150 habitantes: se construyó una superficie multifuncional de unos mil metros cuadrados, entre ellos un pabellón y un baño público, donde se gastaron 1,4 millones de euros. Mucho dinero de impuestos para una plaza de pueblo con baño.
En Hamburgo se renovó un baño público bajo una zona comercial en el centro de la ciudad por 2,08 millones de euros. Sin embargo, la instalación, equipada con vidrio, acero, un ascensor, un elevador para el baño y un cambiador, tuvo que cerrarse de nuevo después de sólo tres meses porque se había filtrado agua. La causa: sellado inadecuado. Aún no está claro si los costes adicionales correrán a cargo de la empresa constructora o del contribuyente.
Un proyecto que suena extraño es el de un puente para murciélagos en el distrito bávaro de Passau. Su objetivo es permitir el paso seguro de los murciélagos a través de la ampliación de la autopista A94, ya que allí habrá un corredor de vuelo. Según la asociación de contribuyentes, el coste asciende a entre tres y cuatro millones de euros. Al principio no estaba claro si los murciélagos cruzarían el puente. Según los expertos en conservación, los animales preferían los pasos subterráneos. Al fin y al cabo, en el puente también hay un carril bici, aunque la asociación de contribuyentes duda de su necesidad, ya que a unos cientos de metros se construyó otro puente al lado. Adjuntamos una foto para vuestra consideración.
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