​La Descarada, cocina casera, desenfada y creativa

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  • Con este nombre tan llamativo, La Descarada resulta ser un restaurante de recetas clásicas y caseras españolas- lo que diríamos de “toda la vida”- pero con ese toque de atrevimiento, de osadía y de creatividad que su chef y propietario, Antonio Beaumont, ha sabido trasladar, con acierto y cariño, a cada uno de sus platos.



      Ubicado en la calle Ortega y Gasset, desde 2021, en pleno barrio de Salamanca (antes tuvo otra ubicación en una calle de la misma zona), este restaurante es un lugar agradable, sencillo, de ambiente luminoso y moderno, donde comer rico y no muy caro, recetas tradicionales, pero con esa vuelta de tuerca de la que hablamos, lo que le da la personalidad a esta “descarada”. Junto a Antonio Beaumont en los fogones, se encuentra su pareja, Valeria Trotta, quien desde enero dirige la sala, con gran hospitalidad y amabilidad.


La Descarada

La Descarada


     Para empezar, la carta es, ya de por sí, divertida. No hay que perderse los “descarados” y juguetones títulos de cada apartado, así como los nombres picarones algunos de los platos como “50 sobras del buey” que hace alusión a un plato de callos “casi eróticos”, según reza el texto de la carta. Pero, sobre todo, se trata de una carta bien concebida y mejor ejecutada. Hablamos de una comida muy seria en su planteamiento con un estupendo chef al frente que cocina con técnica, creatividad, chispa y osadía.


50 sobras de buey, La Descarada

“50 sobras del buey”


      Prácticamente, la carta entera es divisible y compartible, si se desea. La originalidad comienza ya desde los entrantes como el Hummus de cocido madrileño (en lugar de en vuelcos, se presenta sobre una fina tosta de pan y con la ropavieja encima) -una acertada mezcla de exotismo y casticismo-, hasta la ensaladilla tradicional-eso sí, con aguacate, ventresca, cherrys y pepinillo dulce- hasta el original Portobello encurtido con huevo poché, tocineta ibérica y nueces.


Ensaladilla tradicional, La Descarada

Ensaladilla tradicional


      Otros platos de La Descarada que ya se han convertido en “míticos” y que se encuentran en los “Top five” de muchos madrileños son, por ejemplo, las riquísimas croquetas de cecina y puerro. Solo por éstas. Vale la pena acercarse hasta este restaurante. El crujiente de oreja con espuma de patata o los pimientos rellenos de angus son algunas recetas que marcan esa comida tradicional pero rompedora. Otro de los platos que no hay que perderse es el Lingote de pularda con almendras, ciruela y salsa ‘karma’, “que en realidad es korma, pero “con más buen rollito” como explica el chef, pues le añade azahar y rosa.


Croquetas de puerro y cecina. La Descarada

Croquetas de puerro y cecina. La Descarada


     Sus albóndigas de jabalí con una intensa y sabrosa salsa de cerveza negra e higos, o sus, ya citados callos, “las 50 sobras del buey” (a los que se añaden criadillas, pito y lengua de toro) son platos originales que vale la pena probar por la “gracia” de las recetas y por la calidad de su materia prima, algo que es sello de la casa y una de las prioridades del chef.


Albóndigas de jabalí en La Descarada

Albóndigas de jabalí en La Descarada


    Otros platos son, quizás, más tradicionales como el lomo de corvina a la plancha con tomatada marinera y pulpitos o los deliciosos canelones caseros rellenos de rabo de toro y morcillo, a los que, sin embargo, Beaumont añade su toque especial con una crema de calabaza y zanahoria y una exótica seta shimeji que combina muy bien.


Canelones La Descarada

Canelones La Descarada


      La regularidad en la calidad de la carta de La Descarada es uno de sus puntos fuertes porque todo tiene un nivel de autoexigencia elevado, se pida lo que se pida.


      Vale la pena probar algún postre porque también se han cuidado al máximo. Desde el refrescante Sorbete de limón con champán “del caro” hasta una Goxua de Lanús espectacular. Este último es el postre más popular de La Descarada. No en vano, su bizcocho ligeramente borracho, su nata montada casera, una natilla casera  y la crema pastelera con dulce de leche ( homenaje a Valeria y a su Argentina natal) son irresistibles.


Goxua de Lanu00fas, La Descarada

Goxua de Lanús, La Descarada


     El local, con grandes ventanales, por donde entra la luz, con tonos beige y maderas claras, consta de dos alturas y una terraza para 35 personas. Una bonita barra, donde el barman elabora ricos y frescos cócteles, preside el espacio. El ambiente es discreto, sencillo y acogedor, ideal para degustar una cocina interesante, recomendable, de esencia clásica, pero muy “descaradilla” en sus resultados.


Planta superior, La Descarada

Planta superior de La Descarada


Direcciones: c/ Ortega y Gasset, 73- Madrid

Precio medio: 35 euros/ persona

Horario: De martes a jueves de 13:30 a 17:00 horas y de 20:30 a 00:00 horas; de viernes a domingo están hasta las 17:30 h; y para las cenas, viernes y sábados hasta la 1:00 h.

Reservas: Tel. 91 089 76 65- https://www.ladescarada.es/


Carmen Pineda 222

Autora: Carmen Pineda







Bodegón, La Descarada
Bodegón, La Descarada

Lomo de corvina a la plancha con tomatada marinera y rape, La Descarada
Lomo de corvina a la plancha con tomatada marinera y rape, La Descarada

Piquillos rellenos de Angus, La Descarada
Piquillos rellenos de Angus, La Descarada

Terraza, La Descarada
Terraza, La Descarada

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