​Adaly, cocina de autor de raíces auténticas hispano-manchegas

      Hace escasamente un año, Adaly abría sus puertas en el corazón del Barrio de Salamanca madrileño, en la calle Claudio Coello, justo detrás del bellísimo Museo Lázaro Galdiano. Los responsables del proyecto son el chef Eduardo Guerrero que, con tan solo 24 añitos, es ya toda una revelación en el panorama gastronómico madrileño, y parte de su familia, como su encantador padre, Julio, al mando de la sala. Adaly acaba de ser incluido, hace pocas semanas, en la Guía Michelin.

Sala del Restaurante Adaly, CokeRiera

     Curtido en las cocinas del “estrellado” restaurante El Bohío del televisivo Pepe Rodríguez, Edu Guerrero decide volar solo e instalarse por su cuenta en Madrid. Con un maduro saber-hacer, a pesar de su juventud, el chef ha creado en Adaly, una cocina, como bien dice él mismo, “sincera, con raíces, con profundidad, con alma”. 

Edu Guerrero y su equipo@CokeRiera

     Efectivamente, sus recetas saben a auténtico, a buen producto, muy bien cocinado, basado en una cocina tradicional, de la tierra de España y, en concreto, con muchos matices castellano-manchegos, como se aprecia en su propuesta (con su flan salado de sopa de ajo, su ciervo de lomo, los callos o el pichón soasado con flor manchega de su parfait, por citar algunos ejemplos).

Callos y chicarrones de Adaly, CokeRiera

    Hablamos de un restaurante gastronómico, donde se quiere evocar sabores y recrear un ambiente de sosiego y de tradición, donde estar a gusto, y paladear cada bocado. Se nota que el proyecto está hecho con cariño, esfuerzo y mucha honestidad, consiguiendo un resultado de lo más interesante.

    La carta es corta pero muy pensada con dos menús degustación asombrosos que privilegian los productos frescos y de temporada- cuidados al máximo-, los fondos, los guisos “reinventados” y el sabor auténtico.

      El menú Adaly (75 euros), quizás el más representativo de la cocina de Edu Guerrero, apuesta por el contraste de mar y montaña, por los platos tradicionales modernizados y por la verdura de temporada. El primer pase está constituido por varios deliciosos snacks como el pan chino de mejillones, el buñuelo de queso manchego, el panipuri (de puré de lentejas) relleno y una asombrosa oreja crujiente (que gustará, sin lugar a dudas, a aquellos que dicen no querer comer casquería). En los entrantes, tenemos un sabrosísimo canelón de cocido (con su caldito aparte), el puerro confitado (en crema) y un divertido y riquísimo chawanmushi (flan salado de sopa de ajo y bizcocho de chorizo). 

Canelón de cocido, @CokeRiera

     Los principales se dividen en bacalao sobre espinacas a la crema (con leche de oveja) y pistachos y lomo de ciervo con crema de calabaza y manzana. Este último espectacular por su sabor y combinación del plato. 

Bacalao con crema de espinacas y leche de oveja

      Los postres (y prepostre) también valen la pena: desde el fresquísimo lemon-yuzu pie hasta el arroz con leche (a mitad entre la receta tradicional y una crema catalana) y Bailey´s con helado de croissant.

Arroz con leche con Baileys y helado de croissant, @BeatrizCouturier

      Si el Menú Adaly es asombroso, también tiene su interés el Esencia, más reducido (50 euros) pero igualmente de alta calidad culinaria. Entre los platos ofertados, destaca el cordero a la mantequilla negra, plato principal junto a la corvina con salsa de pollo al ajillo.

      Dos menús que, junto con ciertos platos de la carta, no incluidos en éstos, retratan a la perfección esta alta cocina, sorprendente, innovadora, reconfortante y sabrosa que Edu Guerrero consigue transmitirnos. Le auguramos un feliz futuro gastronómico.

     Adaly tiene su cocina a la vista, donde podemos ver “actuar” al chef y a su equipo, en una sala agradable, tranquila, confortable y con un personal acogedor. A la entrada del local, una barra con mesas altas, propone aperitivos y bocaditos (como el pan chino de mejillones o el panipuri de ensaladilla de asadillo manchego, entre otros) para un picoteo informal.

Direcciones: c/ Claudio Coello, 122- Madrid

Precio medio: 55 euros a la carta. Menú Esencia: 50 euros. Menú Adaly: 75 euros

Horarios: de jueves a sábado de 13:00h a 17:00h y de 20:30h a 00:30h. Martes, miércoles y domingos de 13:00h a 17:00h. Lunes cerrado

Reservas: 680 49 72 77- https://adaly.es/

Autora: Carmen Pineda