Viajar por la región de Flandes, en Bélgica, supone un abanico inmenso de posibilidades para descubrir todo el universo entorno a la cerveza ya sea para amantes y aficionados de esta bebida o simplemente para quien quiera conocer una de las raíces culturales y gastronómicas más importantes de esta zona.
Recorrer diversas fábricas de cervezas artesanales (“brasseries” o “breweries”), donde además poder beber o/ y comer, probar la cocina flamenca, visitar museos sobre esta bebida histórica como el “Belgian Beer World” de Bruselas o el Museo del Lúpulo de Poperinge, además de conocer bellísimas ciudades como Gante son algunas de las etapas fundamentales para realizar una ruta cervecera por Bruselas y Flandes.
La primera etapa de nuestro viaje podemos ubicarla en la capital de Bélgica ya que aquí llegan numerosos vuelos desde España de compañías como Brussels Airlines, por ejemplo. Cantillon también llamada Museo Bruxellois de la Gueuze- es una pequeña fábrica de cerveza familiar y artesanal, inaugurada en 1900, en pleno centro de Bruselas, donde se realizan visitas guiadas muy interesantes que nos retrotraen al ambiente de las “brasseries” del siglo XIX, enseñándonos la fabricación de la Gueuze-Lambic, una cerveza que se crea a partir de la fermentación espontánea y que fermenta- a veces, durante largo tiempo- además en botellas. Esta cerveza es típica de Bruselas y es habitual tomarla en aperitivo. En Cantillon, podemos degustar sus cervezas en su propio bar, tales como lambic, gueuze o kriek, todas muy valoradas por los aficionados y entendidos de cervezas mundiales.
Muy cerca de la Grand Place, sitio neurálgico de Bruselas, se encuentra el majestuoso edificio de la Bolsa. Dentro, descubriremos uno de los museos del mundo más grandes dedicados al mundo de la cerveza, hasta la fecha. En Bélgica, la variedad de cervezas es impresionante (con mucho lúpulo, de fermentación baja, alta, mixta, espontánea, de cebada, rubias, morenas, fuertes, ligeras, afrutadas, ácidas…). De hecho, la cerveza belga está reconocida por la UNESCO como patrimonio cultural de inmaterial.
Palacio de la Bolsa, Bruselas
El Belgian Beer World se acaba de inaugurar el pasado 9 de septiembre, con lo que resulta toda una novedad internacional. Se trata de un museo interactivo, multisensorial, de alta tecnología que aborda todos los aspectos relacionados con la cerveza. Desde su Historia, sus orígenes monacales y campesinos en la Edad Media, sus procedimientos de elaboración, los productos utilizados para ello (lúpulo, cebada, levadura, agua), sus usos medicinales, las “brasseries” ( 430 en Bélgica), hasta las marcas ( algunas tan famosas como la Leffe o la Delirium Tremens…) pasando por escenografías, experiencias sensoriales y gustativas y talleres para aprender a hacer cerveza.
El Museo, además de su interés “cervecero”, está ubicado, como decimos, en el espléndido edificio de la Bolsa, en amplias salas de gran belleza, coronadas por una espléndida azotea desde donde podemos divisar la ciudad de Bruselas (la Grand Place, la Catedral…), mientras que bebemos en el bar las cervezas de nuestra elección. Belgian Beer World es una forma de sumergirnos en el patrimonio y la cultura belga de las cervezas- una de las más creativas del mundo-, pero también de divertirnos y aprender a la vez. Conceptos como el humor, la creatividad, la tradición y la modestia están presentes en todo el Museo. No hay que perderse la gran estatua dorada del Duque Juan I de Brabante- conocido mundialmente como Gambrinus- que agradecía a sus soldados el esfuerzo en las batallas, ofreciéndoles cerveza, sentado siempre en un tonel de esta bebida. Una ruta de la cerveza en Bélgica no puede obviar esta etapa.
Sala en Belgian Beer World (c) RCA Bourse Beurs
Está previsto que el Belgian Beer World se convierta en una de las mayores atracciones turísticas del país, atrayendo alrededor de 400.000 visitantes al año.
Gante se encuentra a poco más de una hora por carretera de Bruselas. La ciudad de Flandes, candidata para la capitalidad europea de 2030, es una de las más interesantes, bonitas y representativas de la zona de Flandes, donde, además, la cerveza sigue siendo protagonista. Existe, por ejemplo, una ruta de paseo por la ciudad dedicada a las diferentes fábricas de cervezas, cervecerías y tiendas relacionadas con este producto: la Ghent Scenic Craft Beer. Gante está repleta de estos locales dedicados a la cerveza, con lo que es un auténtico placer poder probar una gran variedad de cervezas a la vez que hacemos turismo por la ciudad.
Gante
En este sentido, es imprescindible, visitar el Castillo de los Condes ( que es el orgullo de Gante ya que solo un ejército pudo conquistarlo: los estudiantes protestando- como no!- contra la subida del precio de la cerveza), los románticos canales con sus maravillosas casas de fachadas “desfiladas”, el Puente de San Miguel, la antigua lonja de pescado, la Catedral de San Bavón del siglo X ( y su cordero místico), la plaza Vrijdagmarkt con la estatua del político Jacob van Artevelde, héroe local, conocido como el “cervecero de Gante”, las calles del centro con sus modernos graffitis y sus casas art déco…Para visitar todo esto y más, existen tours turísticos organizados por la Oficina de Turismo ( www.visitgent.be).
Castillo de Gante
Siguiendo la estela del patrimonio cervecero, Flandes ofrece la posibilidad de visitar muchas fábricas de cerveza muy interesantes en pequeños pueblecitos.
Es el caso de la Heilig Hart (sagrado corazón) (ttp://heilighartbrouwerij.be/), una micro “brasserie”, ubicada en una antigua iglesia desacralizada, en Wetteren, donde podemos ver una estatua de Jesucristo agarrando una botella de cerveza. Un guiño divertido a este lugar donde, por lo menos, la cerveza si se considera sagrada. Hans Dussolier y su hijo Victor son los propietarios de esta fábrica artesanal, donde las cervezas se fermentan en ánforas (el único lugar en Bélgica donde se hace así), dando mucha mineralidad a la bebida lo que reduce la sensación de alcohol y potencia el efecto natural. Como dato curioso, muchas ánforas vienen de Cataluña. Dussolier (que ha trabajado en el pasado en el mundo del vino) elabora varias cervezas muy creativas a raíz de uvas y mediante fermentación espontánea o mixta.
Como buenos “brasseurs”, saben controlar la temperatura, consiguiendo estupendas cervezas. En el grupo llamado “En el nombre del hijo” se encuentran varias tripel, dubbel y de “saison”: Custodia (50% en barril y 50% en ánfora), una cerveza marrón con yogur griego; Soli Deo, 100% en ánfora con uvas sicilianas de Zibbido; Con Sacrum de fermentación mixta y pieles de naranja y especias. Las de “En el nombre del Espíritu Santo” son: Sabbat 2020 de 100% ánfora y frutos rojos; Agape, fermentadas en barriles de madera durante un año, con vino de naranja de Chardonnay de “Finca Parera” (Cataluña) y Epiclese con Gewürstramminer y Riesling.
En Bellegem, se encuentra una de la más famosas, grandes y modernas “brasseries” de Bélgica: la Omer Vander Ghinste con cinco generaciones familiares a sus espaldas, desde 1892- llevándolo en la actualidad Omer Jean Vander Ghinste-. Las cervezas de Omer Vander Ghinste son de: fermentación espontánea (durante 18 meses en toneles de roble) como la Cuvée des Jacobins; de fermentación mixta (como la Kriek Max o la VanderGhinste Roodbruin, entre otras); la Omer tradicional rubia, Lefort y Tripel Lefort de alta fermentación y dos de baja fermentación: la Bockor y la Blauw. Otras como la Ypra (rubia con lúpulo de alta fermentación con refermentación en botella, de toques afrutados y 6% de alcohol) ha sido elaborada en colaboración con la brasserie Vermeulen, unidas ambas por lazos familiares.
Fábrica de Omer Vander Ghinste
La fábrica de Omer Vander Ghinste organiza visitas muy interesantes que incluyen el descubrimiento de la planta más degustaciones (tanto en la propia fábrica como en un encantador bar a la salida del recinto), regalos y, si se quiere, paseos a pie o a bicicleta por los alrededores.
St Bernardus es otra de las más destacadas fábricas de cervezas del oeste de Flandes (región famosa por sus campos de lúpulo, fundamental para la cerveza), concretamente en Watou, muy cerca de la frontera francesa. En este pueblo, se celebra, todos los veranos, un Festival de las Artes Internacional, esponsorizado porBernadette Deconinck, antigua propietaria de la brasserie, gran mecenas del arte local.
St. Bernardus Bier © Jan D’Hondt Ateljé
St Bernardus ( www.sintbernardus.be) además de elaborar cervezas de gran calidad, posee una larga Historia que entronca con comunidades trapistas y acaba con una empresa familiar en la actualidad (Hans Depypere y su hija Julie). St Bernardus acaba de abrir un museo interactivo que vale la pena visitar. Además, se puede comer en el Bar Bernard, en la azotea de la fábrica, desde donde hay unas espectaculares vistas del campo, comprar recuerdos en la tienda (como los patés a la cerveza) o recorrer los alrededores en una bicicleta alquilada. Sus cervezas son de alta fermentación. Por señalar algunas de las más conocidas: está la Abt 12, la “estrella” de St Bernardus, considerada como una de las mejores del mundo; La Wit, una belga blanca tradicional, también muy premiada, y la tripel, una rubia clásica tradicional de abadía. St Bernardus elabora, además un magnum Mathusalem de 6 litros. También, se presentan cervezas en latas (¡aunque, para los belgas, resulte un “sacrilegio” beberlas así!).
St.Bernardus, Bier Experience, @ Brouwerij @St.Bernardus
Poperinge es una etapa indiscutible de una buena ruta de la cerveza por ser la meca de los campos de lúpulo, entorno al cual se articula toda su vida social, económica y cultural. No hay que olvidar que junto con la cebada, el agua, la malta o las especias, el lúpulo es un elemento fundamental para hacer la cerveza. Pero, sobretodo, Poperinge tiene un Museo del Lúpulo, el “Hop Museum” (www.toerismepoperinge.be) y una gran fiesta-desfile que narra la historia de la cosecha del lúpulo y que se acaba de celebrar los pasados 15,16 y 17 de septiembre. Para conocer la cultura del lúpulo y de las fábricas cerveceras de la región, hay que visitar el Hop Museum. En él, se cuenta la historia de esta planta trepadora (que puede alcanzar los 7 metros de altura en los alambres que se disponen en los cultivos), su papel en la cerveza, la vida de los campesinos de lúpulo ( como por ejemplo, que los niños empezasen el colegio en octubre para poder ayudar a sus padres en la cosecha de septiembre), los beneficios medicinales de la planta ( para dormir, para la menopausia, etc)…Una cultura agrícola que en Poperinge y los pueblos de alrededor no se entendería sin el lúpulo.
Hop museum en Poperinge
El desfile es un momento festivo, de alegría, de música y diversión, en el participan muchos habitantes de la zona- desde niños hasta ancianos- para celebrar la cosecha del lúpulo y homenajear esta bonita planta sin la cual la cerveza no sería lo que es.
Desfile del Lúpulo cabalgatas
¿Dónde comer y “catar” cervezas?
Tiradores de cervezas artesanas con una muy amplia gama para elegir, este bar de cervezas belgas y bruselinas, con dos locales en Bruselas (en la plaza Fontainas 8 y en la rue de Savoie, 68) ofrece, además, picoteo de tablas de embutidos y quesos. Unos establecimientos perfectos para degustar buenas cervezas provenientes de algunas de las mejores “brasseries” como la Brasserie des Légendes, la de Ranke, la de la Senne, la Surréaliste o la ya citada Cantillon (en Moeder Lambic, podemos beber la kriek, por ejemplo, de cerezas agrias y un precioso color rojo). Ambiente desenfadado,donde leer comics, divertirse con juegos de sociedad, picotear y, sobre todo, beber cerveza. El Moeder Lambic posee una bonita terraza al aire libre para los días de buen tiempo.
Cata de cervezas belgas en Moeder Lambic
La DOK Brewery, situada a las afueras de Gante, se encuentra en una antigua zona industrial y de fábricas remodelada en locales de moda, tiendas…Un lugar de ensueño para los amantes y fanáticos de las cervezas. Un equipo joven y apasionado fabrica sus propias cervezas artesanales ( pale ale o claras, pils…) con gran dinamismo y creatividad en un local entre rústico, tradicional, con divertidos detalles como lámparas de techo de “araña”. Hay cervezas belgas y, también, extranjeras. Aquí, se puede comer de forma desenfadada (hamburguesas, salchichas, cerdo, ensaladas, patatas…) en un ambiente de taberna divertida de buen comer y, sobre todo, de buen beber cerveza. Una terraza de largas mesas de madera corridas es una estupenda opción para disfrutar al aire libre.
En el pueblecito de Heuvelland, cerca de la bonita ciudad de Ypres ( Leper en flamenco), famosa por haber tenido lugar la batalla homónima, una de las más célebres de la Primera Guerra Mundial, se encuentra este restaurante acogedor, sencillo y rústico, decorado con muñecas de brujas y mucha madera. Se comen platos regionales muy bien cocinados (como la típica Carbonade- estofado de ternera con cerveza-, las patatas fritas, los pescados y mariscos…). Hay una enorme of
Carbonade, plato típico belga
¿Dónde dormir?
Este hotel es uno de los más elegantes, bonitos, lujosos y confortables de Gante. Ubicado en el centro, en un inmenso palacete reformado con tino, cuenta con un patio interior con terraza y restaurante al aire libre (Olivier´s Jazz garden), spa y habitaciones de alto standing. Otro restaurante interior y un muy buen desayuno configuran la excelente oferta gastronómica del hotel. También, se pueden alquilar bicicletas para recorrer la bella ciudad flamenca sobre ruedas. El Hotel Pillows es, desde luego, una magnífica opción para alojarnos en nuestra visita a Gante.
Hotel Pillows en Gante
Oficina de Turismo
https://www.visitflanders.com/es
www.visitgent.be
Autora: Carmen Pineda
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