​Los perritos de maíz llegan a Europa

En EE. UU., los perritos de maíz son un bocadillo popular en festivales y fiestas populares de todo tipo.

      Poco a poco se están haciendo hueco los corn dogs, los perritos de maíz rebozados, en las calles del centro de Europa. Este último éxito alimentario estadounidense consiste en salchichas que se fríen en grasa caliente hasta que estén doradas. Tradicionalmente, hay mostaza y salsa de tomate con los perros de maíz clásicos, pero otras variantes admiten salsa de miel y mostaza, mayonesa o la salsa barbacoa.

      La receta básica de la masa consiste en harina de maíz y de trigo, levadura en polvo, aceite, pimienta, sal, huevos y suero de leche. Las salchichas se espolvorean primero con un poco de harina para que la masa se pegue mejor, se ensartan y luego se giran en la masa con un movimiento giratorio. Esto funciona particularmente bien si la masa se coloca en un recipiente alto en el que se pueden sumergir las brochetas. Luego se fríen los perritos de maíz en manteca caliente.

      La consistencia de la masa y la temperatura de la grasa para freír son decisivas para el éxito de los corn dogs. La masa debe quedar viscosa, casi blanda, para que se pegue bien. La temperatura de la grasa al freír debe estar entre 160 y 180 grados para que los perros de maíz estén bien crujientes por fuera y cocidos por dentro. La olla utilizada para freír debe ser lo suficientemente grande para acomodar los bocadillos, incluidas las brochetas.

     Hay innumerables variaciones de la receta clásica: vegana con verduras, muy picante con jalapeños, perritos vegetarianos con camarones o queso cheddar en lugar de salchichas. También se pueden elaborar Muffins Corn Dog que no necesitan freírse en absoluto. Para ello, hay que llenar moldes de muffins con masa de maíz y poner un pequeño trozo de salchicha en el medio. Luego, el bocadillo de salchicha se hornea en un horno a 180 grados. Los Muffins Corn Dog se pueden servir fríos y calientes.