Camilo de Blas, la esencia confitera de Oviedo
Oviedo es una ciudad muy dulce y que disfruta mucho con la buena pastelería desde tiempos lejanos. Y una de sus tiendas confiteras por excelencia es la popular Camilo de Blas. Una saga familiar originaria de Aranda de Duero en Burgos donde ya contaba con una fábrica de caramelos. En 1827 el patriarca Camilo de Blas Heras funda la primera pastelería en León, un local que expendía ricos dulces, pan y productos delicados en grado sibarita. En 1914 la familia se traslada a Asturias e inaugura confitería en Oviedo y un año más tarde en Gijón.
Confitería Camilo de Blas, en Oviedo, una tienda con mucho sabor y estética
- La saga de Camilo de Blas
La trayectoria profesional asturiana de Camilo de Blas va paralela con la buena marcha de la incipiente industria regional. Buenas ventas y mucho gusto con todas las elaboraciones en las modernas tahonas del momento. José de Blas hijo de Camilo y siempre innovando en sus negocios creó un sabroso pastel que representara a Oviedo en la primera Feria Internacional de Muestras de Gijón. Era el año de 1924 y el encargo de este dulce fue a través del consistorio ovetense. La creación dulcera se le llamó Carbayón como el gentilicio popular de los habitantes de la capital del Principado. Todo un acierto y una estupenda ambrosía que rompió fronteras.
Ese pastel de almendra y yema con base de hojaldre, ha marcado con letras de dulce sabor-llambión- la historia repostera local y regional. Y si hay que señalar una anécdota la explica con emoción el cabeza visible José Juan de Blas referida al maestro de obrador José Gutiérrez. Corrían los prolegómenos de la Guerra Civil y este aplicado repostero tuvo que huir fuera de España y se dirigió con un simple hatillo a Nueva York. Allí con su sagacidad, casi perdido en la gran ciudad y sin saber una palabra de inglés logró enrolarse en la panadería del Waldorf Astoria, un hotel de primera categoría. Su esfuerzo y técnica laboral le empujaron a ser jefe de repostería de este complejo hotelero. A los cinco años de estancia en Nueva York y bien establecido, la añoranza pudo más y regresó a la Patria...
Los emblemáticos Carbayones y los caramelos del Congreso, productos primigenios de esta casa
Escuchado este lance o acontecimiento con final feliz, Camilo de Blas sigue marcando la pauta de la costumbre y la obra bien hecha con notables elaboraciones donde brillan los Carbayones, el merengue italiano y los trabajados bombones realizados por el maestro chocolatero Tino Helguera, amén de exquisitas pastas y productos delicatessen. La tienda confitera es de trazo decimonónico y mantiene el estilo de su época inaugural, que incide en la línea estética de su actual propietario José Juan de Blas.
Tarros de época, con dulcería
Decir Camilo de Blas en Oviedo y resto de Asturias es referirse a los finos pasteles y sus especialidades dulceras. Y qué mentar del dulce asturiano por antonomasia- La Casadiella-. En 2017 ganó el premio de la mejor casadiella del mundo. Un concurso popular celebrado en la localidad de La Foz de Morcín y que cuenta con mucha participación de profesionales y amas de casa. Un producto de raíz rural conformado por masa quebrada rellena de nuez y avellana con un suave golpe de anís. "Les Casadielles" se presentan fritas o al horno.
En la actualidad la hija de José Juan, Paloma, está volcada en el negocio y con sus ideas renovadas está dando a los establecimientos un aire abierto y promocional con nuevas propuestas empresariales. Por ello, Camilo de Blas representa la tradición, el sabor, la esencia y el toque dulcero de Asturias.
José Juan de Blas y su hija Paloma
Pte. de la Asociación Asturiana de Periodistas y Escritores de Turismo. ASPET
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